La factoría Disney adquiere casi la totalidad de los derechos de Marvel. La verdad, es que a mí ni me viene ni me va, mientras que no me toquen a los DC Comics.
La verdad es que estos días, me siento cómo más menopausica en el sentido de que me siento como enferma, pero sin llegar a estarlo. Supongo que con 20 años, todo ya es más maduro, percibes las cosas de mejor manera. Hace días puse que este invierno compartiría algo especial con alguien, y es con el señor Trabajo para ahorrar. Hay un viaje pendiente el año que viene, y no sé...
La idea de quedarme sóla no me horroriza, ya que estoy acostumbrada a ir sitios solas (algunos sitios!), ahora me tocará ir al cine sola, ir a comprar las cosas sola, pero no me da miedo, sino lo contrario. He aprendido a suavizar mi carácter. Ahora la idea de quitarme la vida, ha ido desapareciendo, no por la ilusión que tengo puesta en una persona, al contrario, las personas han puesto ilusiones en que cambie. Está claro que, mis padres nunca aceptarán a un español, pero confío en que cambien. Mi objetivo no es lanzarme a un español. Mi madre ha concertado a través del QQ (mensajería instantánea china) a un chino de Gerona desde hace cuatro meses. No me sorprende que mis padres quieran que su hija mayor conozca a gente de su etnia. Me escandaliza el comportamiento anticuado de mis padres. Pero qué voy hacer? Son mis padres.
Ahora no paro de escuchar Phoenix, la razón es obvia, me he cansado algo de los Arctic Monkeys (la gente se reirá), y porque quería cambiar de aires.
Viene el mes de Septiembre, con algo de tristeza y alegría, tristeza, porque hace 2 años era una persona muy feliz, en verano he desarrollado mi faceta de niñera-cómica con mis primas de Rotterdam y mi sobrina. Adoro la idea de que mi familia se esté occidentalizando, pero mi hermano tiene la idea de que voy a acabar con un chino!
A mí, la verdad es que me da igual, mientras haya amor, los demás sobran, es una relación entre dos personas. En fin, las cosas han mejorado, no es el verano de mi vida, pero ha sido un verano sin preocuparme por nada y nadie (bueno sí, me he preocupado en aprender más de mis padres, casi se separan!). He echado de menos algunas cosas y personas, pero bueno. Es cuestión de aceptar las cosas tal y como son.
Verano 2009, ha sido bueno, le doy un seis, aunque me hubiera encantado viajar a Sudáfrica a aprender inglés.